reconocida trayectoria en el ámbito nacional y latinoamericano, otro amargo resultado de la prometida y no construída Torre Pediátrica del Complejo Hospitalario San Borja Arriarán. En el año 1990, surgiendo desde la Urgencia infantil, se crea la Residencia Médica del Servicio de Pediatría, eliminando las 25 camas del Servicio de Urgencia Infantil y dotando al Servicio de Pediatría de la Unidad de Ingreso. La Urgencia Infantil se trasladó al zócalo del CDT, aún no habilitado en ese entonces, con acceso desde la calle Amazonas, en el sector que actualmente utiliza el Banco de Sangre, Cuidados Paliativos, Dermatología y Obstetricia con el Policlínico de Alto Riesgo Obstétrico. Tres años más tarde se inicia la habilitación del Centro de Diagnóstico y tratamiento (CDT) del Hospital, originando mucho ruido y diseminando una enorme cantidad de polvo en suspensión, lo que obliga nuevamente a trasladar a la Urgencia Infantil, esta vez a un pasillo del primer piso de la torre principal, cerca de la Dirección del Hospital, contando con un flujo único de atención de pacientes, fuera de toda norma técnica, y en forma transitoria mientras se terminaba de habilitar el CDT. En el año 2009 se produce la pandemia del A H1N1 que demuestra lo mal planificada que estabadiseñada laUrgencia Infantil “transitoria”. En conversaciones con el Director del Hospital se plantea que después de terminado de habilitar el CDT, se construyera un Servicio de Urgencia. El terremoto de febrero del 2010 acelera la planificación del eventual cambio. Ahí se inicia un proceso de planificación profesional y técnico, buscando los mejores estándares existentes, doble flujo de atención, selector de demanda, una sala de espera convertible en una sala para eventos con atención masiva de víctimas, recuperador con doble espacio, salas de aislamiento y un Registro Clínico Electrónico, que significaba instalar computadores e impresoras en todos los puestos de trabajo, por lo que fuimos el primer servicio del Hospital Clínico San Borja Arriarán en acceder al registro electrónico de nuestras atenciones. A lo anterior se agrega una implementación de alto nivel, catres eléctricos, camillas con 5 ruedas en giro de 360°, ecógrafo tipo Ecofast para urgencias, luces LED, cuna radiante LED y otros. Así, en Septiembre del 2012, después de cumplir los 70 años desde nuestra fundación, podíamos sentirnos orgullosos no sólo ser la primera Urgencia Infantil de Latinoamérica y de nuestro país, sino que cumplir con los estándares esperados para esa condición. El año 2014, impulsado por los Doctores Eduardo Ferreiro y Francisco Prado, iniciamos el uso de la Oxigenoterapia de Alto Flujo, siendo la primera urgencia infantil en nuestro país en instalar este tipo de tratamiento que acelera la recuperación de nuestros pacientes y les disminuye la gravedad de su cuadro respiratorio. A principios del año 2014, nos reunimos algunos profesionales médicos y decidimos desarrollar una Sociedad Científica nacional que nos permitiera acercarnos y prevalecer el espíritu de nuestros fundadores, logrando el año 2015 dar nacimiento a la Sociedad Chilena de Emergencia Pediátrica, la que cuenta con socios en todo el país y permite ser un lugar de encuentro de nuestras inquietudes científicas. 6 junio 2024. Volumen 23 - N°85
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